La recuperación de Cavani ha sido más lenta de lo esperado, y se estima que podría reintegrarse al grupo el 9 de junio, justo cuando el plantel ya esté en Miami. Sin embargo, la incertidumbre persiste, y su estado físico es un tema crítico para el equipo.
El Matador era considerado una de las grandes apuestas de Juan Román Riquelme para este certamen internacional, pero las lesiones han afectado significativamente su desempeño esta temporada. En los últimos 45 días, Cavani solo ha disputado 33 minutos en el partido de eliminación contra Independiente, y forzar su regreso en ese encuentro lo llevó a resentirse nuevamente.
Desde entonces, el jugador ha estado entrenando de manera diferenciada, lo que ha elevado la preocupación en el cuerpo técnico y entre los aficionados. Miguel Ángel Russo, el nuevo entrenador del Xeneize, tuvo una conversación directa con Cavani al asumir el cargo. Su objetivo fue brindarle tranquilidad y evitar recaídas, mencionando: Un día más es mejor que 10 días menos, según sus declaraciones a Radio Continental.
Actualmente, el panorama indica que Cavani podría llegar justo a tiempo para el primer partido del Mundial de Clubes. En el mejor de los escenarios, podría ocupar un lugar en el banco de suplentes y sumar algunos minutos, dependiendo del desarrollo del encuentro.
La verdadera esperanza del equipo es contar con Cavani en plena forma para el enfrentamiento ante Bayern Múnich en el siguiente partido de la fase de grupos. En su ausencia, Miguel Merentiel parece ser la opción más viable para liderar la delantera contra Benfica. Con Milton Giménez recién recuperado de una lesión en el tobillo, Merentiel se convertirá en la referencia ofensiva en un esquema que, según se ha indicado, contará con un solo delantero de área, ya que Russo ha apostado por el 4-3-3 desde su llegada.
El futuro inmediato de Boca está lleno de desafíos, y la situación de Cavani es un factor crucial a considerar en su campaña en el Mundial de Clubes.
